Skip to content Skip to sidebar Skip to footer

¿Existen diferencias entre swinging y cuckolding?

Aunque muchos defienden que el cuckolding sí forma parte del swinging, muchos opinan lo contrario. Nosotros estamos en medio del debate, porque, por experiencia, tanto el swinging como el cuckolding se pueden disfrutar, y mucho. Hay diferencias, desde luego, y la primera de ellas se basa en una etiqueta, es decir, en intentar separar ambos conceptos cuando, en realidad, ambos forman parte del mundillo de las parejas liberales.

Pero, antes de entrar en más detalles, y en caso de que no estés familiarizado con el concepto “cornudo”, “cuckold” o “cuckolding”, para resumirlo todo en una frase, podríamos decir que el cornudo es aquel hombre que disfruta que su esposa juegue sin él, es decir, que su pareja tenga sexo con otros hombres, estando él presente o no.

De hecho, existen muchas permutaciones o variantes, así como estilos de cuckolding. Algunos de ellos son:

  • A algunos cornudos les gusta que los avergüencen y a otros les disgusta mucho eso.
  • A otros les gusta que sus espermatozoides compitan con los de otros hombres.
  • Algunos cornudos quieren mirar y otros no, entre otros.

Hay muchas maneras de explorar el aspecto de los cuernos, pero este no es el artículo para detallar cada uno de ellos. Lo cierto es que el cuckolding es más una parte del estilo de vida BDSM y puede enfocarse más en la “dinámica de poder” y menos en el sexo real. El BDSM y los estilos de vida swingers se codean muy a menudo, y esa es la razón del debate. Lo que sí es cierto, es que ambos son partes de las diferentes alternativas de disfrutar el sexo en pareja.

De hecho, en nuestro caso, nosotros hemos encontrado un punto medio, en el cual hemos sido capaces de disfrutar, por igual, tanto un intercambio de parejas como un trío, bien sea con una chica u otro chico, o, lógicamente, para una sesión de cuckolding pura y dura.

Ahora, para responder a la interrogante de este artículo, debemos dejar claro que el cuckolding no es lo mismo que el swinging. Lo que sí es posible es que dentro del estilo de vida swinger encuentres a hombres que disfrutan ser cornudos, así como también puede que en el mundillo liberal participen parejas swingers que disfruten ciertos fetiches del BDSM, como los azotes, entre otros.

Todos tenemos diferentes fetiches, y algunos fetiches BDSM, ocasionalmente, pueden cruzarse con el estilo de vida swinger. Por lo general, las parejas swingers no están en la búsqueda de juegos BDSM, aunque sí que los disfrutamos eventualmente. Por lo general, el objetivo de los swingers es tener sexo y, cuanta más gente participe, mejor. De hecho, dentro del mundillo de intercambios de pareja, los hombres siempre suelen ser participantes activos.

Dicho todo esto, debes entender que no hay nada de malo en poner los cuernos, o en ser un cornudo. Solo es una actividad particular dentro de la sexualidad de una pareja liberal. A menudo, las parejas swinger intercambian sus parejas y, si existe un cornudo en un intercambio, entonces, es muy probable que una de las chicas no disfrute del todo la experiencia, porque no participará activamente en el juego, salvo a que esté previamente hablado.

Esa es la razón por la cual el cuckolding es practicado por parejas liberales, pero no por parejas swingers. Aunque, insistimos, hay parejas que disfrutan ambas prácticas, pero siempre es importante tener clara cuál es la diferencia entre ambos perfiles.

¿Cuándo se puede poner en práctica el cuckolding dentro del estilo de vida swinger?

Si te preocupan los cuernos, entonces es preferible que ni siquiera lo intentes. De hecho, las experiencias cuckold no son comunes durante un intercambio de parejas, en principio, porque para que haya intercambio deben existir ser, al menos, dos parejas. Lo que sí suele ocurrir es que hombres solos sean contactados por parejas liberales para participar en un trío, o, desde luego, en una de las variantes del cuckold.

Para divertirnos poniendo los cuernos en el mundo swinger, es muy sencillo: organizando un trío swinger HMH o HHM (dos chicos y una chica). Hay muchos hombres solteros en el mundillo liberal y es muy fácil encontrar uno dispuesto a ser tu “toro”, que es aquel hombre dominante en una actividad de este tipo. Puedes decidir si se trata de un trío swinger o es una sesión de juego BDSM. La elección es tuya, pero, a decir verdad, no deberíamos preocuparnos por las definiciones, sino enfocarnos en disfrutar de las muchas oportunidades diferentes en el amplio mundo de ser hipersexuales.

4.7/5 - (4 votos)

Dejar un comentario

0.0/5