El swinging es sinónimo de diversión sexual. Puedes establecer muchas nuevas conexiones, pero todos sabemos que la relación más importante es con tu pareja, quien es la persona con la debes enfocar todo tu esfuerzo para mantener una relación swinger estable
No importa lo que suceda en el estilo de vida swinger, siempre regresaremos a casa con nuestra persona favorita, la misma a quien amamos y con quien queremos compartir el mundo feliz hasta nuestros últimos días.
Es por eso que, para asegurarnos de que todos tengamos una felicidad por siempre y para siempre, tomemos un momento para poner en práctica estas buenas herramientas que nos ayudarán a fortalecer y mantener una relación swinger estable y sana.
- Clave #1 para una relación swinger sana: Tener una buena comunicación
Es posible que estés cansado de escuchar a las personas que fomentan una buena comunicación de pareja. Pero, con honestidad, la comunicación es un asunto vital en una relación swinger. Si no tienes grandes habilidades de comunicación, piénsalo dos veces y da un paso atrás. La buena comunicación es cómo te mantienes conectado y es eso, precisamente, lo que te evita cometer errores.
No estamos diciendo que debes comunicar todo lo que pase por tu mente o comunicarte constantemente cada cinco minutos. Tampoco es necesario que le envíes un mensaje de texto a tu pareja sobre lo que vas a almorzar, pero debes asegurarte de comunicarle las cosas más importantes, como encontrarte a un exnovio durante tu almuerzo.
Para todos los que han estado en una relación por mucho tiempo, eventualmente se darán cuenta de que algunas cosas pueden causar más problemas de lo que valen. Tal vez tu pareja no quiera saber nada de tu exnovio, y ya te lo comunicó. Sé inteligente y hablen entre sí para saber qué deben o no deben compartirse.
Si le preguntas a un consejero matrimonial, este te contará innumerables historias sobre cómo la mala comunicación sabotea las relaciones y, en última instancia, enriquece a muchos abogados especialistas en divorcios. Sé inteligente y comuníquense.
Hablen acerca de cómo se sienten ambos sobre la relación swinger que llevan y hacia dónde quieren que vaya. Compartan sus sentimientos con sinceridad y pregúntense acerca de sus sentimientos. La comunicación es una poción mágica para las relaciones swinger, así que úsenla con frecuencia.
- Clave #2 para una relación swinger sana: Practicar la honestidad
Toda la comunicación del mundo no va a ayudar si no son honestos cuando se comunican entre sí. Si no confías lo suficiente en tu pareja como para ser 100% honesto, probablemente deberías buscar una nueva pareja. Tu pareja te ama y quiere apoyarte. No pueden apoyarte si no compartes honestamente tus sentimientos.
Ten suficiente fe en tu pareja para compartir los pensamientos más íntimos. Algunos de esos pensamientos pueden conducir a desacuerdos a corto plazo, pero es mucho más saludable a largo plazo. Estarán más conectados sabiendo que ambos están siendo completamente honestos el uno con el otro.
Chicos, si ella les pregunta cómo se ve y siempre responden con la misma respuesta genérica (como “te ves bien”), no ayudarán a tranquilizarla. Ser honesto y hacerle saber que se ve mejor con un atuendo u otro la ayudará a confiar en ti.
Chicas, si les preguntan sobre su nivel de comodidad, sean honestas. No mientan y dejen que tu malestar emocional crezca hasta que haya una explosión masiva. Sería mejor si ambos fueran realmente honestos y sinceros.
- Clave #3 para una relación swinger sana: Los límites deben existir
Ahora que nos comunicamos honestamente, hablemos de algunos de los aspectos más importantes del estilo de vida swinger: los límites. La mejor parte es que tú estableces tus propios límites con su pareja. Deben decidir juntos qué es realmente importante compartir con otros y lo que no.
Algunas parejas establecen límites físicos. Estos límites pueden basarse en el soft swinging, o si no les importa, entonces un full swap. También podrían establecer que no se permiten besos o el sexo anal. Habla con tu pareja sobre los límites físicos. Ambos necesitan sentirse seguros y protegidos en su relación swinger.
También puedes establecer límites emocionales. Estos límites no pueden incluir comunicaciones privadas con otros swingers, solo comunicaciones grupales. Otro ejemplo sería jugar solo una vez al mes, de modo que el intercambio de parejas no se apodere de su relación y amistades de vainilla.
- Clave #4 para una relación swinger sana: Apoyo mutuo
Ambos necesitan demostrarse el uno al otro que son su mayor apoyo. Escucharse es bueno, pero tomar medidas de manera proactiva para demostrar que son tu prioridad número uno en la vida es aún mejor. Sí, puede que estés visitando un lugar con mucha gente sexy y jugando con otras personas, pero ellos no serán tus personas favoritas y nunca lo serán.
Asegúrate actuar de manera adecuada todos los días y en cada evento swinger para demostrarle a tu pareja que es tu prioridad. Hablen entre ustedes para identificar sus preferencias comunes y trabajen juntos para construir una fuerte sinergia hacia esos objetivos. Recuerda ser paciente con tu pareja. Si necesitan tiempo extra, dales todo el tiempo que quieran.
- Clave #5 para una relación swinger sana: La lealtad por encima de todo
Cuando esté chateando con otras personas, siempre menciona las muchas cosas fantásticas sobre su pareja. Comparte la pasión que sienten el uno por el otro. No esperes a que los eventos swinger sean apasionantes. Amas más a tu pareja, así que muéstrale cuán apasionado te hace sentir en el día a día.
- Clave #6 para una relación swinger sana: Demuestra cuánto te preocupas por tu pareja
Si estás en alguna fiesta, asegúrate de que tu pareja sea tu prioridad. Piensa en lo que podrían disfrutar. ¿Está sonando su canción de baile favorita? Entonces, llévala a la pista de baile. ¿Se acabó su bebida? Entonces tráele otro trago. Hacer cosas buenas el uno por el otro es una excelente manera de dejar que tus acciones griten cuánto te preocupas por tu pareja.
- Clave #6 para una relación swinger sana: Eviten juzgarse mutuamente
La vida no es fácil y ambos están haciendo todo lo posible para hacerse felices el uno al otro. Enfócate en lo positivo. Es importante estar agradecido por todas las cosas positivas que tu pareja aporta a tu relación.
- Clave #7 para una relación swinger sana: Estar en los momentos más difíciles
Todos queremos una vida libre de dramas, pero muy pocos de nosotros llegamos a tener esa vida. Para la mayoría de las personas en las relaciones swinger, se cometerán errores y esos errores pueden conducir a malentendidos o peleas. Recuerda, ambos se aman mucho y ambos sienten mucha pasión por esa relación. Puedes superarlo y usarlo como una experiencia de aprendizaje para fortalecer aún más su relación swinger.
El primer paso para superar la pelea es calmarse. A menudo, hay un desencadenante de la lucha que nos empuja más allá de nuestra zona de confort. Queremos evitar que el malentendido se convierta en una pelea en toda regla. Enfócate primero en calmarte. Trata de respirar profundamente. Si necesita salir de la habitación durante unos minutos, hazlo. Cuenta hasta 10 antes de decir nada.
Después de calmarse, pueden trabajar en comunicarse entre sí. Hablen sobre la serie de eventos que conducen al malentendido. ¿Por qué tú o tu pareja se encontraron fuera de su zona de confort? Una vez que comprendas qué causó la situación, pueden trabajar juntos para hacer ajustes que protegerán mejor su relación y los sentimientos de ambos.
¿Cuándo llega el éxito en una relación swinger?
El éxito en el estilo de vida swinger llega cuando pueden disfrutar de sus deseos dentro de los límites mutuamente acordados. Es posible que deban crear nuevas reglas, ajustar las reglas antiguas o tomarse un descanso del swinging.
Si tienes una pelea fuerte y no puedes manejarla por tu cuenta, busca a un terapeuta para que les ayude. Cuando busquen un terapeuta, busquen uno sexualmente positivo. Pueden ayudarles a determinar si el estilo de vida swinger es una buena combinación o es mejor quedarse en el mundo de la vainilla. Algunos terapeutas tradicionales pueden ser demasiado críticos y no estar abiertos a diferentes opciones.
